Venta de la hacienda Aranjuez, la casa, corrales y demás obras, 64 yeguas, 22 caballos, 560 reses, por parte de Nicolás Ulloa, por sí y como tutor de Melchora Solares, a favor de Juan José Lara. El sitio se deslinda así: desde el paso real del río Aranjuez, siguiendo por la fuente, aguas abajo hasta la orilla del mar, de aquí rumbo al este, hasta la boca del río de Tubures y entrando por éste, aguas arriba, rumbo al norte, hasta el paso real del mismo río y desde este paso atravesando la quebrada Barboza hasta el paso real de Aranjuez. Va agregada la información levantada por Ulloa. Cancelada en 1840 por José María Zamora, marido de Melchora Solares
