Solicitud de los licenciados Manuel Aguilar y Pedro Zeledón para que se les paguen sus dietas y viáticos con motivo de haber sido enviados el año 1828 a Guatemala y El Salvador como representantes de Costa Rica. Alegan los solicitantes que aunque hicieron el viaje por mar, debió computársele el leguaje de tierra, y como así no fue hecho, reclaman el déficit y otros honorarios y gastos que el Poder Ejecutivo dejó de abonarles. Informó el Ejecutivo, en sentido favorable en parte a la reclamación, y la Comisión de Hacienda dictaminó que el asunto debía someterse al conocimiento del Congreso Federal. Se aprobó el dictamen de la Comisión. Inc. en marzo de 1831