Obligación de Antonia Acosta Arévalo, viuda, a favor de la Real Caja por 290 pesos de cacao, valor del remate en ella de una negra llamada Magdalena, con su hija nombrada Benita, lisiada. Margen, 4 setiembre de 1727, el Capitán Tomás López del Corral, Teniente de oficiales reales, cancela por el resto de 112 pesos a favor del Teniente Pedro de Alvarado Acosta, quien exhibe dos recibos anteriores a cuenta de esta deuda