Testimonio de la carta que con esta misma fecha dirige Joseph de Guzmán, Teniente de Oficiales Reales, a Juan Antonio de Bogarín, su lugarteniente en la ciudad de Esparza. Le ordena que embarque y venda en pública almoneda unos negros que echó a tierra en el puerto de La Caldera, una embarcación que procedente de Panamá se dirige al Perú sin registro y que haga lo mismo con todos las mercaderías que hubiese desembarcado.