Apolonio Lara, Administrador Marítimo, da cuenta al Ministro General de que Domingo Matey, plantó su barraca a una legua de distancia de la Nacional y allí recibe las cargas de su buque, los que vienen por otros buques, defraudando así las rentas de la Administración y le pide órdenes para el decomiso de esas mercaderías, pide que el Guarda de Puntarenas, las vigile y no permita su traslado a otra parte. Por equivocación aparece en la Revista con el número 7074
