Contacto de una panadería en Alajuela, propiedad del Cubano Cornelio Urbina. En este establecimiento se fabricaba toda clase de panes blancos y dulces, contaba con una máquina de amasar movida por un motor eléctrico de 2 caballos de fuerza y además tenía 11 operarios reconocidos como los mejores panaderos del país. Atendía pedidos de la ciudad, pueblos y fincas. Se observa en la imagen una vista exterior del local y un grupo de niños en la acera y en la calle. Costa Rica. Alajuela