Proposición del Diputado Pío Murillo para que la residencia de los Supremos Poderes alterne en todos los pueblos del Estado en vez de ser en las cuatro ciudades principales. La Comisión de Legislación, a fin de evitar rivalidades de localismo y por otras varias razones, presentó un proyecto de ley en que se declara capital del Estado la población del Murciélago, a donde se trasladarán las Autoridades Supremas tan luego como estén construidos los edificios necesarios. Se aprobó el proyecto de ley