Decreto en que se previene a los Concejos Municipales que deben compeler a los padres de familia a proporcionar a sus hijos la instrucción en doctrina cristiana, leer, escribir y contar desde la edad de ocho años hasta la de catorce, incurriendo los omisos en una multa manda que los mismos concejos nombren, examinen y titulen a los maestros: establece exámenes semestrales en las escuelas y dicta otras disposiciones sobre el particular. Emitido por la Asamblea Constitucional el 4 de mayo de 1832 y sancionado el 14 del mismo mes