Proyecto para que se utilice un sobrante de la fuerza eléctrica de la planta de Tacares para dar luz a las poblaciones de Río Grande, Balsa, Escobal, Quebradas, Hacienda Vieja, Coyolar y Ceiba, sin perjuicio alguno para el Ferrocarril Eléctrico al Pacífico. Inició en julio 1933