El Presbítero Juan López de la Rauda suplica, en Granada al Vicario eclesiástico, que certifique que son de su propiedad las doce mulas que remite a Panamá con las del Presbítero Nicolás Antonio de Belando, Cura del partido de San Juan Bautista de Antón. Súplica de Belando para que se le dé igual certificación tocante a 50 mulas. El mismo Belando solicita en Cartago para exportar sus mulas a Panamá 19 de febrero de 1737.