Denuncio de terreno situado en Santa María del cantón de Esparta. Fue hecho por Miguel Salas Alfaro y 16 compañeros, quedando como denunciantes en virtud de cesiones, el mismo Salas Alfaro, Pedro Carvajal Murillo, Carmen Solórzano Chavarría, Eduardo Villalobos Zamora, Rafael Fernández Chinchilla, Rodolfo Carvajal Alvarado, José María Alvarado Villalobos, José Picado Rojas, Pedro Sequeira Hernández, Manuel Castro Hidalgo, Ramón Carranza Agüero, Calixto Jiménez Alvarado y Aparicio Ruiz Solís. Medido el terreno denunciado resultó tener 4.930 hectáreas 38 áreas. Inicia en agosto 1892. Se remató el terreno medido en los denunciantes por partes iguales. Solórzano cedió su lote, pero fue improbada la cesión
